Confianza ciega

Desde luego ke entre la confianza y el ego, hay un abismo, pero kizás, el ego es, por naturaleza, resistente a dejarse fluir, aferrándose a un sentimiento de poder y dominación, obteniendo un supuesto control por el ke uno se siente inseguro... pero en cambio, la confianza, y más la ciega, provoca todo tipo de reflexiones de forma vital, sin terrenos trillados o límites dnd aferrarse... es un dinamismo de procesos fascinante del ke siempre puedes llegar a aprender constantemente.
Esta tarde, he aprendido, me he visto en un temblar de momentos de kietud imperfecta, mostrándome frente a frente en medio de una tormenta, justificando una ausencia inkieta e intentándome liberar de trenzadas preocupaciones.
En estas últimas tres semanas, he sido una navegante en todo un mar de dudas, sin mapas imponderables ni realidades aventuradas percibiendo momentos anunciados y visibles, obedeciendo leyes desconocidas por mí y manifestándome bajo una pesada carga inflexible ke no dejaba ceder un alivio soñado.
Me he dado cuenta de ke he sido un juguete constante para uno de mis cimientos más importantes, ke ha desubicado una inmensa proporción de mi ser más lógico e inmaduro.
Tres semanas en el ke todo lo suyo ha pertenecido al desconocimiento, haciéndome despertar la mayor de mis suplicas, y, en respuesta, sólo he recibido una corta duración de mis pedidos ante un preámbulo de menosprecios e indiferencias, concluyendo a mi confianza como un peligro de un defectuoso embalse ke ha sido vendido a cualkier postor.
Una confianza ciega en mis principios, una confianza ke no necesita del tesón para triunfar, una confianza ciega ke creí ke merecías,... esa ha sido mi motivación, pero me he visto inclinada a sospechar y, en consecuencia, he sido víctima de unos palos inclementes con un deliberado exceso de dureza, ke me ha llevado hacia un peligroso callejón, esperando ke tuviera alguna salida, como si de una condición indispensable se tratara.
Ahora es asumida como un nuevo dogma, ha terminado por convencerme y apoderarse de los pensamientos confirmados. Es ahora cuando mi confianza ciega forma parte de una reducción, de una simple pieza, hacia un gigantesco mecanismo destructor. Has convertido, con audacia e inescrupulosas maniobras de mercadeo, ke esa confianza ke yo tanto valoraba sea monopolizada impropiamente por tí, bajo un manejo sutil de tus prácticas distorsionadas a la ke tu llamas amistad.
Lo ke se construyó en sus días, ha perdido todo valor, tu has decidido abandonar el barco en el ke, mi confianza y sinceridad, venían de la mano como pasajeros en un crucero ke nunca creí ke iba a naufragar.
Ahora permíteme conducir mi bienestar por otros derroteros, dnd sea yo la única dirigente de mi resistencia, ke ofreceré de manera cotidiana y profunda, para ke pueda ser captada por otros, sin sentir ese incauto y vacío ritual del ke tú has hecho gala días atrás.
Parece mentira lo simplista ke ha resultado ser todo... Llegué siendo la dueña del cotarro de las urgencias, acostumbrada a explorar, examinar, analizar, diagnosticar y tratar a mi aire, sin depender prácticamente de nadie, y me encontré, en cuestión de mes y medio, mirando, explorando y escuchando. No hacía un papel, no recetaba, no tomaba la iniciativa... no era fustrante, pero ahora ha llegado a su final.
Ahora ya te puedes marchar... he decidido dejarte ir.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Trucos baratos...

"La oración de la rana" de Anthony de Mello

Ningún pedo huele y tu hijo/a no es feo/a