Patologías más comunes en nuestra sociedad - I -

En todos lados puedes encontrar mentirosos/as de todo tipo, calaña y condición. Yo he tenido "el placer" de encontrarme con unos cuántos y, siempre veo el mismo patrón de conducta.

Confunden las fantasías propias con la realidad, son incapaces de enfrentarse al mundo real porque éste le causa verdadera fustración, no se enfrentan a las verdades que le contrarian, no tienen cojones a superar los obstáculos que les pone la vida y engañan para sentirse unos TRIUNFADORES que nunca han sido, mienten cuando no se perdonan los errores que han cometido a lo largo de su vida y son egoístas de pies a cabeza.

Pero siempre hay distintos tipos de gente mentirosa:

- EL MENTIROSO PIADOSO:

Sus engaños no suelen ser inocuos y mienten por caridad para agradar a los demás a toda costa. Además, son de los que se empeñan en no ofender y así le sale la jugada perfecta, porque no se enfrentan a nadie y, como le pilles, les resulta un mal trago reprocharles, porque te dejan por imbécil. Son los típicos que te sueltan algo así como: "No, mujer!!! Tú no engordas, sólo retienes líquidos".


- EL MENTIROSO INSEGURO

Este es el mejor. El que te jura o te intenta convencer de que te dice toda la verdad, pero oculta, deliberadamente, información porque sabe que ésta es poder. Suelen hacerlo por inseguridad personal y falta de valor para así poder defender SUS ACCIONES y/o REACCIONES ante cualquier situación tensa o incómoda para ellos.
Son los típicos que te sueltan algo así como: "Estoy super cansado, ayer curré como un hijo puta y fue un día super movido", pero no te habla de la fiesta que se montó hasta las 4 o 5 de la madrugada.


- EL MENTIROSO INFANTIL

Es el que engaña como los crios pequeños por temor a un castigo pero, en cambio, disfruta saltándose las reglas. Cuando inventa o engaña, se siente incómodo con él mismo, así que le hace fácilmente detectable pues, en cuanto le pinchas, entona el mea culpa sin problemas y utiliza el perdón de los demás, porque es consciente de que declarar la verdad y el mea culpa, es efectivo.... y sino que se lo pregunten a Bill Clinton
Son los típicos que te sueltan algo así como: "Sí... te he mentido, lo siento. Sé que está mal, pero no sabía cómo decirte la verdad... -y una vez obtenido el perdón, aquí paz y luego gloria- ... aix!!! como te quiero!"


- EL MENTIROSO OCASIONAL

Este es la hostia. Es al que lo llaman por teléfono y, directamente, pasa de éste, y cuando le preguntas por qué no lo coge, te dice que valora el tiempo que está contigo y pasa de atender a nadie más. Suelen mentir para evitar situaciones incómodas o para evitar dar explicaciones. Lo jodido es que es difícil pillarle, porque planea y repasa muy bien su historia y casualidades de ésta para que, en el momento de contarla, suene creíble.
Son los típicos que te sueltan una respuesta que te hace dudar y de la que no obtendrás nada más, pues ellos dicen no tener más explicación que esa.


- EL MENTIROSO COMPULSIVO

Miente tan a menudo que ya ni se dá cuenta de lo que hace o dice, se cree sus propias mentiras y, hasta dice lo que se le ocurre sobre la marcha. Es toda una adicción!!! pero está claro que lo hace porque es inseguro. Disfraza historias corrientes con aventuras apasionantes, trágicas o dramáticas y así cree que despertará la compasión o la simpatía de quién la escuche. Eso sí, si le pillas el embuste, no lo reconocerá jamás, aunque le des pruebas feacientes de ello. Es imposible cambiar a este tipo de personas, pero son fáciles de identificar, porque sus trolas son poco elaboradas y descuidan muchos detalles a su paso.


- EL MENTIROSO SENSATO

Este camufla sin tapujos lo que le disgusta de su propia vida y de sí mismo. Suelen ser personas que se creen el patito feo o que tienen baja su autoestima, pero que necesitan INFLAR SU EGO para no desilusionar a los demás.
Son los típicos del refrán aquel que dice: "se pilla antes a un mentiroso que a un cojo".


- EL MENTIROSO MANIPULADOR

Es todo un profesional. Tiene respuesta para todo, todo calculado y una frialdad impresionante. Su afán es la de ganar a cualquier precio o conseguir lo que quiere, utilizando las armas que sean necesarias y sin tener ningún reparo en el daño que pueda causar. Pueden responder a cualquier pregunta porque tienen repasada su historia al milímetro y suelen tener respuestas para todo, respuestas que no te dan margen a una réplica, sino a seguir con la duda. Estos son los más peligrosos, pues si los descubres, a parte de negarlo todo, te harán sentir culpables y mantendrán una pose de falsa emoción o indignación que te la harán pagar muy cara.
SI VES UNO DE ESTOS... CORRE!!!

No hace falta que uno sea de un grupo o de otro... pueden formar parte de todos ellos. Así son los mentirosos, verdaderos camaleones.


Movimientos nerviosos, parpadeos excesivos, llevarse la mano a la boca, ojos o nariz repetidamente, errores de dicción, tartamudeos incontrolados, mantener la mirada en preguntas fáciles y esquivarla cuando intentas profundizar en el tema, cambios de postura repetidos, tics, pupilas dilatadas, sequedad de boca, indignación ante preguntas que no contienen un motivo aparente de enfado y respuestas sin sentido (del tipo: "esto es así y punto", "es lo que hay", "ya te lo he explicado, si no lo entiendes o eres cabezona, es tu problema", "por más que te diga, tú seguirás creyendo lo que quieras", etc), son algunas de las cosas que suelen descubrir a un verdadero mentiroso.



En fin... de qué valen las mentiras?

Prefiero ser sincera y echarme piedras sobre mi propio tejado, que pasar la vergüenza de que me cataloguen de mentirosa.

Lo jodido es cuando, aún siendo sincera, puedan catalogarte de mentiroso sin tener motivos aparentes o bases sólidas para ello. Pero de eso ya hablaremos otro día...

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