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Mostrando entradas de diciembre, 2007

Dichosas coletillas finales... "sabes?"

Sí, sí, ya sabéis a lo que me refiero. No os habéis fijado nunca en las coletillas que soléis decir muchas veces y que desconoces hasta que hay alguno/a con cara de "gilipuá" que te dice: "achanta la boca de una puñetera vez con esa coletilla, coño!!! que me tiés hartico/a!!!"??? Pues a mí si me ha pasado... Me dijeron que repetía muchísimas veces una coletilla y pensé: "anda ya!!! si yo hablo perfesssstamente!" hasta que van surgiendo, de la nada, más almas caritativas que, por tu bien, te comentan que repites mucho esto o lo otro. Entonces es cuando te mosqueas y te "autofijas" en lo que dices (a todo esto, con cara de imbécil y conversaciones de gangosa debido a la dificultad que uno tiene al hablar mientras se analiza a sí mismo) y... ostras!!! que es verdad y todo!!! Por norma, no escribimos igual que hablamos, pero tras escuchar y analizar a todo el que mantenía una conversación conmigo o cerca de mí (que hay que tener ganas de andar analiz

Ningún pedo huele y tu hijo/a no es feo/a

Ea!!! Un poco de crueldad del más estilo Grynch A ver... cuántos papis y mamis hay que farden de lo guapetones que son sus hijos y tú les miras con cara de póker mientras piensas: "y cómo disimulo yo ante el comentario de lo guapo que es ESTO???" Nop... no se puede disimular, no puedes ser sincera!!! mas que nada porque tu integridad física se verá en peligro. Amos! dile a esa madre que su hijo no es el más guapo del mundo mundial, que verás que rápido te ganas la gorda de navidad con la del niño incluído... Digo yo que las madres deben de tener su instinto más animal algo susceptible y desarrollado en estos casos, porque como no le digas lo "preciosísisisisisisisisisimo" que es su hijo, ya puedes correr, porque te ves a la susodicha tras de tí queriéndote canear. Supongo que las mujeres nos metamorfoseamos ante estos acontecimientos (me refiero a tener un hijo). Solemos ponernos pesadísimas con el embarazo, poniéndonos el termómetro cada media hora aunque estés más

Están en todas las fiestas...

Están en todas, incluso diría que aún faltan unos cuantos más por nombrar, pero son de los que nunca fallan, a los que solemos ver en todo tipo de eventos o fiestas... y es que ha llegado el gran día, ese en el que las recargadas paredes de la iglesia son un preludio a los acontecimientos súbitos de este gran día y, en el peor de los casos, algún daiquiri fluorescente que se bebe el pomposo capullo que cree estar en un carnaval. Es por eso que, para mí, las fiestas de casamiento siempre fueron la quinta esencia del cirujeo visual y, como no bailo, no me saco fotos y no participo en ritos grotescos (ni ligas, ni pastel, ni ramo), me puedo dedicar puntillosamente a la mofa descarada y al prejuicio más cruel. Después de todo, no es mi culpa si la pista se llena de monos sofocados con estribillos de Paulina Rubio o viejas papeloneras bailando con la versión extendida de ‘Los Pajaritos’. Por ejemplo, la novia marioneta (de contextura pequeña y rasgos, en su rostro, dulces), pasa toda su fie

Manual para hombres...

Dado que siempre veo blogs dedicados a las mujeres, a cómo contentarlas, cómo entenderlas y cómo buscar cualquier excusa para engañarlas haciéndolas sentir mejor, yo voy a exponer este blog dedicado a los que se hacen llamar "hombres". Este vendría a ser el manual para hombres: FUNCIONES BÁSICAS Para empezar, hay que tener en cuenta que el aparato vale para pocas cosas, o por lo menos, para muchas menos de las que él presume. El mecanismo de utilización del hombre es tan sencillo como el de un cepillo: lo coges por el mango y lo usas para lo que quieras. El aparato está dotado de un monomando y dos cojinetes. El monomando tiene dos posiciones: plegado y desplegado. En la posición de desplegado, el monomando sólo admite dos movimientos: adelante y atrás. MÁXIMO RENDIMIENTO Para sacar el máximo rendimiento de un hombre, antes de cualquier orden, hay que pronunciar en tono meloso la frase aquélla de... "Valoro mucho más a los hombres como tú; inteligentes, bien dotados y a

La tentación

Yo estaba muy feliz. Mi pareja y yo habíamos salido durante más de un año, y decidimos casarnos. Mis padres nos ayudaron en toda forma posible, mis amigos me apoyaban, y mi chico era un sueño. Solo había una cosa que me molestaba mucho, y era el mejor amigo de él. Era inteligente y atractivo, y a veces flirteaba conmigo, lo que me consternaba. Un día, el amigo de mi chico me dijo por teléfono que fuera a su casa a ayudarle con la lista de los regalos de los invitados a la boda, así que fui para allá. Él estaba solo y, cuando llegué, me susurró que, ya que me iba a casar con su mejor amigo y teniendo en cuenta que él tenia ciertos sentimientos y deseos hacia mi, quería hacer conmigo el amor una sola vez antes de que me casara y comprometiera mi vida a su mejor amigo, que ya no podía aguantar más. Qué podía decir??? Estaba totalmente sorprendida y no pude articular palabra. Así que me dijo: "Iré al cuarto, y si tu lo deseas, entra y me tendrás". Admiré su maravilloso trasero al